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7 excusas para no usar condón (y cómo superarlas)

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Sheila

Hace más de 40 años que el VIH nos obligó a hablar abiertamente sobre el sexo y sus precauciones. Esa pandemia vino a comprobar lo que ya era un secreto a voces: la gente tiene relaciones sexuales por placer y, muchas veces, fuera de un matrimonio tradicional.

Pero aunque desde aquel momento se hizo evidente que, para seguir teniendo sexo sin tener que preocuparte por el VIH o alguna otra infección de transmisión sexual (ITS), la mejor opción era usar condón, todavía hoy existen personas que ponen mil excusas para no hacerlo.

Motivos y pretextos

No hay nada más importante que proteger tu salud y tu vida usando el preservativo. Así que si te encuentras con alguna de estas excusas (incluso en tu propia mente), es hora de desarmarlas y tomar acción.

  1. Tengo alergia al látex. Hay que reconocer que esta excusa es ingeniosa en cuanto a retomar una condición que existe, pero que no es tan frecuente como muchas personas quieren hacerlo ver. Si usar condones de látex te produce irritación o sarpullido, busca aquellos que son de poliuretano u otros materiales diferentes al látex, muchas de las grandes marcas comerciales los tienen.
  2. No se siente igual. Podríamos decir que este argumento tiene algo de razón, pues la “sensación” de haberte protegido y disfrutado al máximo de la relación sexual no es la misma cuando no usaste condón y empiezas a dudar sobre si pudiste haber adquirido una infección. En cuanto a la sensación física cuando usas un preservativo, quizás te hace falta actualizarte, pues hoy en día se fabrican condones ultradelgados que, además, ayudan a transmitir el calor entre un cuerpo y otro. Y no olvides que usar un buen lubricante a base de agua es fundamental para hacer todo el acto más placentero.
  3. Me aprietan. ¿Recuerdas aquellos videos donde una persona se metía un condón por la cabeza y lo inflaba como un globo utilizando solo el aire exhalado por su nariz? Si nunca los viste, imagina la escena y eso basta para responder a esta excusa. Los condones son muy flexibles, pero si aún estás convencido de que los que has probado son demasiado pequeños para ti, es momento de buscar las marcas que te ofrecen diferentes tallas.
  4. Esta persona se ve sana. Debes saber que, muchas veces, las ITS no se notan a simple vista. Ni siquiera al revisar los genitales de tu pareja puedes estar 100% seguro o segura de que no hay algún microorganismo dañino de este tipo. Además, infecciones tan serias como el VIH, la sífilis o el herpes genital pueden no mostrar síntomas durante periodos de tiempo muy largos, por lo que básicamente cualquier persona podría tener una ITS y no presentar signos en su cuerpo.
  5. Sólo la puntita/salirse antes de eyacular. Hay quienes tratan de convencer a su pareja de que el condón no es necesario si no realizan “todo” el acto sexual, sino que sólo introducen un momento y/o una parte del pene, ya sea por la vagina o por el ano. La realidad es que las ITS pueden estar en la piel del glande (la punta del pene) y también en el líquido preeyaculatorio, que muchas veces se produce desde que inicia la excitación sexual, a manera de lubricante. De igual forma, la infección puede estar en la vulva o en la vagina, o también en la piel del ano. Esto significa que el riesgo de infección no se evita con hacer una penetración parcial o al retirar el pene después de un rato y previo a la eyaculación.
  6. Se corta el momento. Tal como aprendemos que al conducir motocicleta hay que usar un casco y eso no debe desanimar a quienes disfrutan esa actividad, igual sucede con el condón. Debes estar consciente de que el condón es parte de una vida sexual segura y plena, por lo que no tienes por qué verlo como una interrupción, sino que hay que incorporarlo a la dinámica. Si es tu pareja quien te lo pone, se convierte en una actividad compartida que toma sólo unos segundos y que demuestra cuidado y respeto mutuo.
  7. Son muy caros. Hay muchísimas marcas de condones y los hay de todos los precios. Es más, en AHF República Dominicana los tenemos gratis. Sólo es cuestión de saber buscar y encontrarás una opción para ti.

Así que ya lo sabes, cuida tu salud, protégete y disfruta tu vida sexual sin preocupaciones. Y si quieres conocer todos nuestros servicios sobre salud sexual y VIH, acércate a nuestras oficinas o escríbenos por Whatsapp."